Las Crónicas de Spiderwick

Esta película tiene hadas. Y trasgos, duendes, criaturas indefinidas, un grifo… un hermoso grifo… y de paso habla de la problemática del padre ausente y la falta de magia en la sociedad adulta. Las Crónicas de Spiderwick (08’) está dirigida por Mark Waters y nos habla sobre una familia recién fragmentada, que se va de Nueva York para comenzar de nuevo en una antigua casa (herencia familiar) en medio del bosque. El protagonista de la cinta es Greg, un niño curioso y valiente, pero también un poco resentido por el cambio y por el hecho que sus padres se han separado sin entregarle razones claras. Tiene un gemelo, Simon (ambos son interpretados por Freddie Highmore) y una hermana mayor, Mallory (Sarah Bolger). Su madre se llama Helen, y es interpretada por Mary-Louise parker: que algunos recordarán de Fried Green Tomatoes, otros (como yo) de The West Wing, y muchos de la serie Weeds.

Greg descubrirá en la antigua casa los secretos guardados por su antepasado Arthur Spiderwick, y a partir de entonces lo fantástico estará a un toque de distancia.

A ver… si ud. espera encontrarse con algo parecido a Las Crónicas de Narnia, va por mal camino. Esto no es un grupo de cuicos ingleses que se van a una mansión campestre y descubren un mundo oculto en el ropero: lo que tiene su propio encanto. En esta cinta se encontrarán con una familia que te puedes encontrar al lado tuyo en el taco de la tarde, con un niño que tiene un implante de Ipod y se muere por las papas fritas, que de súbito descubre la fantasía que lo rodea ahí: en su propio mundo. Eso es novedoso, y agrada. Los efectos especiales se usan pero no se abusan, y la historia en sí aparenta ser poco innovadora hasta que te encuentras con ciertos giros y desenlaces inesperados, que llaman la atención. Por decir algo: el final no es lo que se espera en una película de este tipo, en absoluto. Hay humor, por supuesto, recordemos que éste es un flan orientado al regalón de la casa. En todo caso es un humor tierno que nos hará sonreír, a pesar de la edad que tengamos. Los personajes fantásticos están muy bien configurados: no habrá sorpresas, pero tampoco decepciones. Hago especial mención al grifo, mi criatura mitológica favorita.

Es todo lo que les puedo decir. Si la va a ver, no habrá desperdiciado la plata. Se va a ir con la sensación de haber visto una película “redondita”.